Uno de cada 20 españoles es adicto al móvil. Más del 15% de los ciudadanos de nuestro país confiesa que utiliza mucho el teléfono y siente estar en “riesgo de padecer complicaciones”. Estos datos se daban a conocer la primavera pasada a raíz de un estudio llevado a cabo por la Universidad Complutense de Madrid, el Hospital Universitario 12 de Octubre, el Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y la Universidad San Ignacio de Loyola, cifras un tanto alarmantes, la verdad, pero que es fácil creer a pies juntillas. Basta echar un vistazo a nuestro alrededores, en la oficina, cuando vamos en el autobús, al pasar tiempo con los amigos… ¡Todos pegados a la pantalla del smartphone!
Si consideras que eres uno de esos ciudadanos en riesgo de pasar a tener un problema mayor tranquilo. Se acercan las navidades y estas fiestas hay un nuevo gadget que podría ayudarte a superar el ‘mono’ de smartphone. Se trata de un aparato creado por el diseñador austriaco Klemens Schillinger, un teléfono sustituto o terapéutico, como ya se lo conoce.
Ha lanzado al mercado cinco diseños que tienen como objetivo imitar las interacciones que hacemos sobre la pantalla táctil de los aparatos. Por ejemplo, deslizar el dedo, simular un scrolling, hacer zoom… Según Schillinger, si se reemplazan las funciones digitales por las piedras se genera un estímulo físico que sustituye a loq ue uno hace con los teléfonos inteligentes.
Estos aparatos están hechos de plástico negro y tienen un peso similar al de un móvil real. La idea es que la experiencia del ‘look & feel’ sea prácticamente la misma que si se utilizara un dispositivo de conectividad de los que usamos a día de hoy.
Klemens Schillinger se basó en un trabajo del filósofo italiano Umberto Eco, una investigación que llevó a cabo para dejar de fumar con su pipa. Para ello la reemplazó por un simple palo de madera, ¡y la cosa funcionó!
Por el momento no están a la venta pero esperamos de verdad que pronto salgan al mercado. Como apuntábamos, sería un regalo ideal para esta Navidad, ¿o no? Yo al mismo, lo confieso, creo que igual no me vendría nada mal hacerme con uno de esos móviles sustitutos.
Sea como fuere, habrá que esperar un poco… En estos instantes forma parte de un proyecto de Klemens Schillinger que se engloba en una exhibición llamada ‘#Offline – Design for the (Good Old) Real World’ que se ha mostrado en Viena durante la Semana del Diseño.
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